
El Centro de Convenciones de Concordia fue sede de la 36º Jornada nacional del cultivo del arroz. Organizada por la Asociación de Ingenieros Agrónomos del Nordeste de Entre Ríos, el Círculo de Ingenieros Agrónomos de San Salvador y la Fundación Proarroz. Contó con la participación de especialistas, productores y técnicos que buscaron intercambiar conocimientos, explorar innovaciones y fortalecer la red profesional del sector arrocero. Allí estuvo presente Campo En Acción para dialogar con los protagonistas.

El docente de Fisiología Vegetal de la Universidad Nacional de Entre Ríos, Edgardo Arévalo; manifestó: “Ser eficientes es lograr, con la misma cantidad de recursos, la máxima respuesta. En este contexto de baja de precios, uno puedo lograr mayor rentabilidad si aumentamos la productividad, y por eso tenemos que ser efectivos”.
“El rendimiento potencial es definido por el ambiente: con que eficiencia la planta aprovecha la radiación para convertirla en grano. Para acercarnos del rendimiento actual a ese potencial, que es de 14 toneladas versus las ocho actuales; debemos tener en cuenta factores como control de malezas y un riego realizado de manera correcta. Asimismo, la fecha de emergencia correcta en Entre Ríos es octubre, primera quincena o hasta el 20; ya que el rendimiento máximo se logra en esos ambientes”, proclamó a su vez.

El presidente de la Asociación de Plantadores de Arroz, Enrique García; exclamó: “Hay una gran presencia de público como todos los años, nos siguen acompañando productores y empresas. Este año le dimos un enfoque distinto a la jornada, pensando en la eficiencia para alcanzar altos rendimientos y así mitigar el efecto de la caída del precio”.
“Los productores ya han empezado a tomar decisiones de cara a la campaña que viene: muchos han disminuido el área por cuestiones de costo o inversión; esto para nosotros no es bueno ya que desde la Asociación queremos una provincia con productores sembrando en la chacra y no una integración”, añadió.

Hugo Muller, presidente de la Fundación Proarroz, enfatizó: “En general, cuando el mercado está complicado, la gente está ávida de escuchar a especialistas disertantes y las convocatorias exceden las expectativas. Yo nunca me olvido de la crisis de 1999 producto de la devaluación de Brasil, donde esperábamos poca gente y resultó todo lo contrario”.
“La campaña pasada desde el punto de vista productivo, fue muy buena: obtuvimos rindes record de 8.200 kilos por hectárea que incluyen variedades especiales como Largo Ancho, que rinden un 20 o 25% menos; por lo tanto el rendimiento del Largo Fino está subestimado, ya que anduvo en 8.600 u 8.700 kilos lo cual es record absoluto”, informó Muller.

Franco Montiel, de la firma Don Asdrubal SRL, aseveró: “Para el control de malezas, el bajo volumen me parece una herramienta muy importante; sobre todo los drones pulverizadores resultan una herramienta muy buena. Dentro de todo son de fácil acceso en lo económico comparados con un avión, y tuvieron un crecimiento notorio en Entre Ríos pero requieren un piloto bien capacitado que conozca la compatibilidad de las mezclas”.
“Veníamos trabajando con 50 o 60 litros en aplicación terrestre y pasamos a un drone que tiene 8 o 10 litros, donde el 50% del caldo es principio activo. La calidad de estos principios y saber lograr una compatibilidad de la mezcla es la clave del éxito”, sumó.

El asesor contable y productor arrocero Pablo Rode, detalló: “La campaña pasada fue muy buena, tanto en kilos por hectáreas como en hectáreas sembradas: se sembraron 227 mil, más que en la cosecha anterior. Obviamente eso impulsado por la diferencial de precios que venía atravesando el arroz en el ciclo anterior; en el actual nos encontramos con una diferencial de precios menor a la mitad de la que teníamos al inicio de la campaña previa”.
“A mi parecer, debemos colocar el arroz argentino en la mayor cantidad de destinos posibles; concentrándonos en aquellos donde nuestros exportadores ya están mirando y colocando el producto, sea con cáscara o elaborado, como Centroamérica o el Caribe. La presente campaña la arrancamos con un precio muy por debajo de lo que se espera, estamos hablando de 150 o 155 dólares por arroz cáscara al productor, lo que llevaría los márgenes de ganancia y rentabilidad al rojo; obligándonos a ser eficientes y eficaces en la selección de los lotes trabajando con un paquete tecnológico adecuado y tratando de generar alianzas estratégicas entre productores e industriales”, comentó.

Juan Ignacio Herrera, jefe de Productos Post-Cosecha de Rizobacter, explicó: “Se gasta tanto esfuerzo y dinero por conseguir a veces un kilo más en la producción, y luego por cuestiones de tecnología se pierde en la post cosecha. Creo que es un rubro en el que Argentina está avanzando y puede crecer muchísimo: hoy se estima que el 10% de los granos producidos son atacados o comidos por insectos.
“Actualmente, las plagas como el gorgojo o el taladrillo son los que generan el 90% de los problemas, trayendo a consecuencia más pérdidas. Para combatirlas, Rizobacter está lanzando al mercado Balboa, un producto de origen natural en base a un metabolito que trae un nuevo mecanismo de acción, con banda verde y menor toxicidad para el operario y los alimentos”, subrayó.

Por su parte, Walter Bianchini, de Bianchini Agricultura de Precisión; señaló: “Estamos acompañando otra jornada arrocera, presentando las nuevas incorporaciones que ha hecho la empresa pensando en este sector. Si bien nuestra empresa históricamente ha sido reconocida por la parte de nivelación, estos últimos años nos hemos abocado a traer soluciones integrales: nos venía faltando la siembra y hoy pudimos presentar la nueva línea de sembradoras de Semeato, marca brasilera que vuelve al país después de muchos años”.

Asimismo; Ezequiel Rodríguez de XAG ATLAS, sostuvo: “Desde Atlas estamos trabajando hace un año con XAG, pertenezco a la importadora y estoy a cargo del área técnica. Estamos muy contentos porque venimos avanzando fuerte en lo que es productividad y capacidades del drone; sobre todo en una zona arrocera como esta donde se utiliza muchísimo”.
“Algo fundamental para pensar en la seguridad del operario y el equipo es el contar con un buen radar de obstáculos, el cual también afecta la precisión del drone. También se trata de un drone extremadamente robusto, preparado para cualquier tipo de vibración que se presente al volar; y en el caso del modelo P750, tiene 70 litros de capacidad. El modelo anterior, P100 Pro, tiene una capacidad de 50 litros con opción de llevarlo a 60 litros”, sumó.

Lisandro Repetto, del área de Capacitaciones de Agronorte, afirmó a su vez: “La clave para producir arroz está en una buena preparación del terreno para poder contener el agua, que es un insumo esencial para el cultivo y requiere atención para no malgastar gasoil. La tecnología satelital, sobre todo las señales RTK, tiene como característica la repetitividad -que le permite pasar siempre en el mismo lugar-; y alta precisión horizontal y vertical. Para saber cómo se va a mover el agua, el relevamiento altimétrico con tecnología RTK es un primer paso esencial”.
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