Saltar menúes de navegación e información institucional Teclas de acceso rápido Actualidad
Marcelo Cattaneo arrocero

"Con los drones y el mapeo satelital todo es más fácil y seguro"

Para el productor, la variedad Gurí es la semilla que más seguridad le genera.
Para el productor, la variedad Gurí es la semilla que más seguridad le genera.
12/10/2021 20:39 hs

La implantación de arroz marcha en tiempo y forma dentro de los lotes donde produce Marcelo Cattaneo, en Estancia La Negra, -ubicada en Colonia La Mora en el Departamento Villaguay, casi al límite con el Departamento San Salvador-.

Lo cierto es que la expectativa se renueva con cada siembra y por lo que determinó Campo en Acción en diversas recorridas por zonas arroceras, el clima permite concretar las complejas labores, recomendadas a partir del 20 de septiembre, a pesar que la mayoría espera las lluvias para tomar decisiones.

“Mi impresión es que el área sembrada será muy similar a la del año pasado, quizá algo mayor” sentenció el productor a un lado del lote. Especificó que “el buen precio impulsa a arriesgar algo adicional y el pronóstico es que seguirán bien”. En su caso se mantiene dentro del rango de las 150 y 200 hectáreas.

El hombre va a lo seguro, pone a las arroceras en rotación con ganadería e implanta solamente variedad Gurí, de la que, dijo, “es la mejor adaptada a la zona, ofrece una gran calidad comercial y lo más importante es que permite la cosecha con baja humedad sin que merme la calidad”. Como complemento hace uso y manejo de las herramientas tecnológicas para elevar la calidad de la producción: “Con los drones y el mapeo satelital todo es más fácil y seguro”, advirtió.

Al dar un panorama de lo que ve andando la región, ponderó que se trabaja a media máquina, a la espera de las precipitaciones que faciliten los nacimientos de lo ya plantado, el taipeo y la ampliación del área sembrada. Como sea, los resultados estarán disponibles recién después del 15 de marzo, cuando, especula el productor, las cosechadoras anden levantando granos a todo vapor.

De lo hecho, aportó que la densidad de siembra se achica con el paso del tiempo. Contó que hace unos 15 años era factible aplicar entre 180 a 200 kilos por hectárea y ahora se rondan los 120, con buenos nacimientos y rendimientos. Sentenció, incluso, que cada vez se acercan más las entrelíneas de las sembradoras que vienen a 17 centímetros lo que logra una buena implantación.

Como todos en la zona identificó al capín como la maleza que más daño causa a las plantaciones. Y no dudó en mencionar que el resistente es el más complicado. “Los costos se disparan con las tareas de control, teniendo en cuenta la suba de precios en dólares de los insumos”.

Marcelo Cattaneo arrocero

Envía tu comentario

Teclas de acceso