La contadora Zulma Klocker, del estudio contable LK Asociados, participó una vez más de la emisión radial de Campo en Acción por LT 14 Radio General Urquiza; donde brindó consejos a los oyentes para mejorar sus hábitos fiscales.

Klocker citó un informe de junio del corriente realizado por técnicos del Banco Mundial, el cual detalla la situación de los productores en Argentina en cuanto a falta de acceso al crédito, falta de infraestructura, altos impuestos; entre otros. “Estos factores han contribuido a una situación que dificulta la competitividad y la sostenibilidad del sector agropecuario en Argentina. Escuchamos todos los días decir: los números del campo están muy ajustados, se está trabajando a pérdida”, añadió.

Ante este escenario político, la contadora sostuvo: “Quiero recomendarle a nuestros productores oyentes que hoy más que nunca deben reducir los costos de la empresa. Para ello, voy a hablar de la reducción de los costos impositivos mediante la planificación fiscal, ya que estamos llegando al final del año y consecuentemente llega la fecha de cierre del ejercicio fiscal de las personas humanas y también de muchas personas jurídicas o sociedades”

Klocker explicó que la planificación fiscal se logra mediante estrategias que permiten reducir la carga tributaria o diferirla en el tiempo para minimizar su impacto en el patrimonio del contribuyente. “Por ejemplo, si el contribuyente llega a fin de ejercicio con dinero en efectivo, ¿Lo deja en la caja? No, debería poner en caja de ahorro para así no pagar Bienes Personales; ya que los depósitos en pesos o en dólares en cajas de ahorro, plazos fijos, acciones y títulos públicos no están gravados por este impuesto”, señaló a su vez.

“Si consideramos a un establecimiento ganadero, la tenencia al cierre de ganado va a influir en el resultado y en la determinación del impuesto a las ganancias”, sostuvo la gerenta del estudio LK Asociados. “Si es un establecimiento de cría, tener en cuenta que si está fuera de la Zona Central Ganadera, hay ventajas en la valuación de inventario que implica que se pagará ganancias por la venta de hacienda y no por la tenencia. Sería conveniente que dicha empresa elija una fecha de cierre de ejercicio en algún mes donde aún no se produjeron la mayor cantidad de nacimientos, para no cargar al cierre con la mayor cantidad de stocks y con ello anticipar el impuesto a las ganancias, en lugar de diferirlo por un año”, añadió.

Refiriéndose a bienes de uso, Klocker indicó que en el caso de ser inmuebles, y previa discriminación de si son propios o arrendados, “en caso de ser titulares si son de la sociedad o de la persona humana conviene realizar un contrato de arrendamiento o Aparcería”. Pasando a maquinarias y otros, “los bienes de uso adquiridos en ejercicios 2017 y anteriores tienen una amortización histórica sin actualización, mientras que los adquiridos en ejercicios 2018 y posteriores tienen una amortización actualizable por Índice de Precios al Consumidor (IPC)”.

La profesional precisó que también se pueden vender y reemplazar muebles amortizables como también inmuebles: “De esta manera, se logra diferir el pago del tributo a los períodos fiscales siguientes al de realizada la venta del bien a reemplazar”. “Otro importante tema a tener en cuenta a tener en cuenta en la empresa agropecuaria, donde es común que se vendan bienes a plazo por el alto valor de los mismos es el denominado método del devengado exigible. Este se aplica a dicho tipo de operaciones en cuotas, y consiste en imputar las ganancias en el momento que se produce la exigibilidad de las cuotas”, señalo.

Klocker mencionó que dicho método aplica a ventas de mercaderías con plazos superiores a los 10 meses, “pero no obstante, podrá optarse por imputar las ganancias en el momento de producirse la respectiva exigibilidad, cuando las ganancias se originen en la venta de mercaderías realizada con plazos de financiación superiores a diez meses. También aplica a ventas que no sean mercadería y las cuotas de pago sean exigibles en más de un período fiscal”.