Saltar menúes de navegación e información institucional Teclas de acceso rápido Actualidad
Sanidad Animal

Senasa pide que los productores denuncien los casos de carbunclo

Identificaban como malditos a los campos donde había hacienda con carbunclo.
Identificaban como malditos a los campos donde había hacienda con carbunclo.
20/10/2020 21:26 hs

El carbunclo bacteriano es una enfermedad zoonótica que afecta a los rumiantes. Es de denuncia obligatoria por parte del productor ante su posible aparición. Sin embargo no siempre se da a conocer, con lo cual provoca un peligro inminente.

“En Senasa estamos preparados para recibir denuncias de productores con rodeos afectados y proceder con las acciones establecidas”, indicó María Laura Fortuny, especialista del Senasa.

En Argentina es conocida desde la época colonial. Se denominaban “campos malditos” aquellos establecimientos en que la enfermedad se presentaba recurrentemente a través de los años.

No denunciar significa un riesgo importante dado que el carbunclo es generado por una bacteria, que cuando entra en contacto con el oxígeno, forma una espora que la convierte en resistente a las condiciones climáticas severas y que le permite sobrevivir en el medio ambiente.

“Los bacilos contenidos en los líquidos que emergen de los cadáveres o post apertura de los mismos por parte de animales predadores o por acción del hombre, esporulan y permanecen en el suelo, perpetuando así la enfermedad en campos y regiones”, insistió Fortuny.

Por ese motivo, es fundamental que ante una sospecha, el propietario del animal se comunique con el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria, para que sus técnicos desarrollen los manejos necesarios en él, con la finalidad de evitar su propagación.

Como método de prevención, “la vacunación es fundamental”, explicó la especialista. “Se trata de una vacunación anual de bovinos de 6 meses a 2 años de edad, en la primavera, que luego se debe repetir anualmente. La inmunidad se da después de 10 ó 14 días”, informó.

En los establecimientos con antecedentes de carbunclo, y ante la detección de casos de esta enfermedad, se recomienda la vacunación sistemática del ganado y la eliminación mediante el procedimiento correspondiente de los animales muertos y del material contaminado.

La vía mas frecuente de infección en rumiantes es la digestiva. Los esporos ingresan a través de pastos, concentrados o harinas de hueso contaminados. Una vez dentro del organismo los esporos “germinan” y comienzan a invadir los diferentes tejidos del organismo hasta producir la muerte.

“El carbunclo se encuentra dentro del grupo de enfermedades de denuncia obligatoria por lo que ante la sospecha o confirmación de algún caso en animales recomendamos contactarse con el Senasa para notificarla”, insistió.

“Es una enfermedad infecciosa altamente contagiosa, que afecta preferentemente a los rumiantes y es transmisible a otros animales y a las personas”, expresó la referente del organismo AL SITIO abc Rural.

Al recibir una denuncia sobre presunta detección de la enfermedad, los especialistas del Senasa acuden al establecimiento denunciante para comprobar si realmente se trata de carbunclo. “En caso de confirmar la zoonosis se realiza una actuación sobre el foco”, sostuvo.

Por otra parte, la entrevistada recomienda a los productores no quemar ni abrir los animales sospechados, porque eso aumentaría el riesgo de propagación. “Ante la sospecha de la enfermedad en un animal muerto no hay que quemarlo ni faenarlo. Solamente comunicarse con la oficina más cercana de Senasa que actuará de manera inmediata”, sostuvo.

Abrir un animal pone el riesgo a la persona que lo hace y también a las pasturas que se encuentran en el lugar, ya que las bacterias podrán sobrevivir allí por muchísimos años. “Cuando se detecta la enfermedad se recomienda enterrar el animal para que las bacterias no se activen”, dijo la entrevistada.

La especialista dijo que el principal signo de carbunclo en los bovinos es la muerte súbita con sangre sin coagular en los orificios naturales (boca, nariz y ano), en los cuales se encuentra la bacteria que la produce. “No se logra observar los inicios de la sintomatología debido a que es una enfermedad de presentación muy aguda”, comentó.

En el caso de los caballos, es posible observar signos clínicos como edemas en cuello y abdomen, así como trastornos digestivos, cólicos y fiebre. En los porcinos también se da una evolución más lenta, con edemas en la zona del cuello.

“Ante la sospecha de muerte por carbunclo, no cuerear ni mover los animales, es preciso llamar al veterinario para hacer un buen diagnóstico”, concluyó la medica veterinaria.

Sanidad Animal

Envía tu comentario

Teclas de acceso