Ganaderos y veterinarios de Federal y zona de influencia de Veterinaria Hernández participaron de una jornada de capacitación para saber más sobre combate de parásitos en las tropas.
La conferencia, a cargo del consultor Pedro Steffan, rondó en torno a las estrategias que se imponen, para, como dijo a Campo en Acción, “trabajar sobre problemas viejos con nuevas soluciones”. El profesional subrayó que sin diagnóstico de laboratorio y profesional no es posible encarar tratamientos, considerando también la resistencia a los antiparasitarios, un factor central de la época. Ponderó que “en cada campo, el veterinario debe ajustar muy bien el manejo para monitorear y determinar el momento de desparasitar. Cada establecimiento debe conocer cuáles antiparasitarios le funcionan y cuáles no”.
Dejó saber que los animales jóvenes, de recría e invernada, son los que deben llevarse la mayor atención: “Ahí es donde la enfermedad se expresa con mayor riesgo. Insisto, el buen diagnóstico es clave y es para cada campo en particular. Así, las posibilidades de lograr un buen control aumentan”.
Al divulgar algunas mediciones, especificó que en un ciclo de recría completo, los parásitos generan una clase de pérdidas, cuando están con diarrea, que pueden llegar a 40 o 50 kilos por animal. Y sin llegar a ese extremo, en invierno, rondan los 20 o 30 kilos por cabeza. Tras cartón, remató con que a esa pérdida se suma cuando se desparasita con drogas resistentes, que puede llegar al 60%.
El experto definió que “el trabajo clave es la relación entre el productor y el profesional. Así se concreta un programa de control y los análisis son esenciales. Transmitimos un mensaje claro y es que la pérdida es de ganancia de peso y en el desarrollo de las hembras, la base de los rodeos de cría”.
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