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SUSTENTABILIDAD

Producción responsable es lograr más con menos impacto ambiental

El profesional trabaja para Conicet e INTA.
El profesional trabaja para Conicet e INTA.
06/11/2020 16:58 hs

La jornada Producción Responsable en su cuarta edición se concretó de manera virtual e incluyó cuatro excepcionales disertantes.

Fernando Andrade abordó temáticas como la pobreza, el impacto ambiental, el requerimiento de los alimentos y la implementación de tecnologías duras. Invitó a “manejar los recursos con responsabilidad”.

Andrade subrayó que la demanda de los alimentos está incrementándose, por las siguientes causas: El aumento de la población y la tracción de la demanda. Debido a que cuantos mayores son los ingresos per cápita, se aumentan las calorías y los requerimientos de los cultivos, tanto para alimentación humana directa, como para alimentación de animales.

El experto explicó que se estima que el ingreso per cápita capital se incrementará para el 2050 un 1,5 por ciento promedio por año.

Andrade remarcó las grandes diferencias entre los distintos continentes. Por ejemplo, África tiene que aumentar su producción, mientras que Europa no necesita aumentar sus requerimientos de alimentos de aquí al 2050.

Además, subrayó que si ponemos un límite en la dieta en 5 mil kilocalorías tanto para alimentación animal y humana, reduciría la demanda un 12%.

Mostró el potencial de expansión de la producción agrícola a nivel global para qué la superficie pueda aumentar la secuencia.

Andrade se refirió a las emisiones de gases y apuntó que el efecto invernadero de la agricultura aporta entre el 23 al 30 por ciento de los equivalentes dióxido de carbono de gases de efecto invernadero.

Subrayó que estos impactos perjudican a la futura producción y la seguridad alimentaria, sobre todo por el avance de los desiertos en grandes áreas del mundo y por la subida del nivel del mar por derretimiento de los hielos, lo cual ocasiona inundaciones y pérdida de áreas productivas importantes.

Respecto a la deforestación, declaró que se talan alrededor de 7 millones de hectáreas por año, lo que genera problemas de pérdida de biodiversidad, exponiendo al suelo a procesos erosivos, y ocasiona excesos hídricos porque un cultivo anual consume menos agua que un bosque.

También comentó sobre la contaminación y explicó que en el mundo se utilizan 4 millones de toneladas de plaguicida principio activo, y 200 millones de toneladas de fertilizante medido como nitrógeno y óxido de fósforo y potasio. Todos los años fluyen 9 millones de toneladas de fósforo hacia los mares y todos los años se extraen más de 120 millones de toneladas de nitrógeno atmosférico y se sintetiza nitrógeno activo como fertilizante.

Respecto a Argentina, señaló que utiliza más del doble del promedio mundial por hectárea de agroquímicos y tenemos problemas de resistencia de malezas. Al mismo tiempo, en nuestro país se utiliza menos de la mitad del promedio mundial de fertilizante por hectárea.

El profesional del INTA destacó que otro problema es la degradación de los suelos, y que anualmente se degradan unas 5 millones de hectáreas.

Respecto a la pobreza, explicó la situación a nivel mundial mediante gráficos, que demuestran que hay una gran parte de la proporción de la población con ingresos muy bajos.

También demostró que las variables básicas de desarrollo responden al aumento del ingreso per cápita; debido a que crecen en la medida en que aumenta el poder adquisitivo cuando ya se alcanzaron las variables de desarrollo social.

Aclaró Andrade que una gran parte de la población consume en exceso, mientras que otro sector tiene necesidades de mejora de su ingreso y sus consumos, esto marca la necesidad y la urgencia de regular consumos, de hacer un uso eficiente de los recursos e insumos, de buscar energías limpias renovables y de utilizar métodos de producción sostenible.

El científico señaló las proyecciones lineales de las estimaciones que se realizaron sobre la base del año 2010. Se puede observar que los valores reales de producción están por encima de las proyecciones lineales hacia el 2050 y además creció la producción por habitante, es decir, se produce más en función de las proyecciones que se habían hecho anteriormente.

Informó que ha aumentado el uso de fertilizantes, las extracciones de agua, las emisiones de dióxido de carbono, el uso de plaguicidas. A la vez creció la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera y añadió que la superficie de bosques continuó creciendo, aunque disminuyó la tasa de crecimiento en la que se encontraba.

Puntualizó que estos recursos se están utilizando a tasas decrecientes, pero siempre crecen. Sin embargo, aumentó la productividad de uso de recursos e insumos, pero aumentó el uso con desaceleración en algunos casos.

En otro tramo de su presentación remarcó que en África, aumentó el porcentaje de personas desnutridas; en los países y las regiones más pobres hay mayor inseguridad alimentaria, crecimiento poblacional; además, el impacto ambiental está causando más problemas en esas zonas, debido al calentamiento global.

Proyectó las preocupaciones que persisten a nivel mundial, como la desnutrición, la escasez del agua, el sobrepeso y la obesidad.

Apuntó Andrade que los conocimientos deben orientar a los procesos de producción, el manejo de suelo, las rotaciones, el manejo de los cultivos pasturas y pastizales, el manejo integrado de plagas.

Detalló que toda tecnología potencialmente funcional a los objetivos mencionados tiene que ser evaluada con rigor científico.

Dio algunos ejemplos de las innovaciones tecnológicas que se deben tener en cuenta, como los manejos con base psicofisiológicas y ecológicas, agricultura por ambientes de precisión, cultivo de cobertura, recirculación de nutrientes, manejo integrado de plagas.

Se refirió al caso de Argentina y explicó que se realizan progresos en cuanto a mejorar las proporciones gramíneas en las rotaciones, intensificación de la secuencia, se está difundiendo el uso de cultivos de cobertura, también la agricultura por ambiente, el manejo con base psicofisiológicas, aplicaciones de herbicidas al blanco.

Andrade reveló que las sociedades fracasan si no cuidan la capacidad humana de innovación, los desafíos que enfrentamos en cuanto a satisfacer futuras demandas requieren de la colaboración.

Concluyó que para superar los problemas mundiales, se necesitan incentivos, regulaciones, inversiones en infraestructura y sobre todo educación; para la prosperidad individual y colectiva, para que los individuos sean creativos; colaborando mediante la empatía, el diálogo, el respeto y la confianza.

Finalizó la charla recomendando su libro Los Desafíos de La Agricultura Argentina: Satisfacer las futuras demandas y reducir el Impacto Ambiental, escrito junto a otros investigadores del INTA.

Fuente: Todo Agro

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