El presidente de la cooperativa La Ganadera y referente de la Federación de Cooperativas Agropecuarias de Entre Ríos (Fedeco), Gonzalo Álvarez Maldonado, afirmó a AIM que desde el sector auguraban “que del disenso se llegue al consenso, pero más allá del diálogo donde se coincide o se discrepa, no hay concreciones para que de una u otra manera se ponga en carrera al sector productivo”.

El mundo demanda carne y alimentos, que es lo que el sector produce para tener un consumo interno sustentable y el excedente exportable, para ingresar las divisas que necesita Argentina. El escenario “es auspicioso para después de la pandemia, ya que Argentina tiene el privilegio ecológico y agroecológico de ser un sector de la producción natural y hoy el mundo demanda carne”, pero el campo esperaba “que del disenso se llegue al consenso, pero más allá del diálogo que llevan adelante los dirigentes nacionales quienes hablan con autoridades del ministerio de Agricultura, se coincide, se discrepa, pero no hay concreciones para que de una u otra manera pongan en carrera al sector productivo”, dijo a esta Agencia Álvarez Maldonado.

En ese sentido, dijo que lo que ocurre en Nación también pasa en Entre Ríos, ya que “nos reunimos y coincidimos con el ministro de la Producción pero no vemos las soluciones”, y ejemplificó: “Establecieron un valor arbitrario y sin consensuar del Impuesto Inmobiliario (casi un 50 por ciento en muchas zonas, con la inflación menor)”.

Además, indicó que se precisa que el Estado “tenga un rol activo, que no significa que coloque más impuestos sino que se reduzca la presión impositiva; se generen canales de comunicación para la producción; que lleguen servicios como internet a los campos (que hoy están incomunicados); se invierta en infraestructura, principalmente en los caminos; y que se mejore la salud y la educación, ya que en este escenario quedaron en evidencia deficiencias en salud y educación, ya que a nuestra gente de campo no llega ni internet a las escuelas rurales por lo que los hijos de los empleados y productores radicados en el campo no tienen muchas posibilidades de seguir educándose”.