En Entre Ríos empeora la condición del cultivo de maíz de primera en pleno período crítico, según los datos del último reporte de la Bolsa de Cereales de Entre Ríos. “Las elevadas temperaturas registradas en el último período con el agravante de las escasas o nulas precipitaciones afectan gravemente el rinde del cultivo”, indican en el parte.

La condición del maíz durante el último mes mostró una fuerte caída en la sumatoria de las categorías muy buena - buena (51 %) y por lo tanto un incremento en las categorías regular y mala (49 %). Si bien desde la siembra el cultivo se mantenía en buena condición, acompañado por precipitaciones de montos modestos y con una periodicidad regular el quiebre de los últimos 15 días ubicó a casi la mitad del área en una situación de regular a mala.

Si bien este panorama afecta a una gran parte del área, la caída de la producción está condicionada por el estado fenológico, tecnología aplicada y reserva de agua en el suelo de cada lote.

Los efectos de la sequía se pueden ver tanto en el suelo (rajaduras) y en las plantas con síntomas como: acartuchamiento de hojas, muerte de hojas basales e interrupción en la formación y llenado de granos.

En ese marco empezó la siembra de maíz de segunda y tardío. En el ciclo 2020/21 se sembraron 28.200 hectáreas, para esta campaña la intención de siembra se ubicaría cercana a ese valor y al momento lo que condiciona el avance de las labores es la falta de humedad en el perfil del suelo.