Se ha fijado el 15 de octubre como el Día Mundial del Lavado de Manos, un día de promoción dedicado a aumentar la conciencia y la comprensión sobre la importancia de lavarse las manos con agua y jabón como una forma eficaz y accesible de prevenir enfermedades y salvar vidas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene como objetivo en esta fecha mantener un perfil global sobre la importancia de la higiene de manos en el cuidado de la salud y la necesidad de difundir su relevancia.

Desde el ICAB (Instituto de Control de Alimentación y Bromatología) se promueven en toda la provincia los cursos de manipulación de alimentos. Uno de los ejes principales de los mismos, para asegurar la inocuidad alimentaria, es el lavado de manos. Es en este sentido que desde nuestra Institución destacamos su implicancia en el cuidado de la salud.

Como tema del Día Mundial del Lavado de Manos este año se refleja una pregunta importante: “¿Por qué son importantes las manos limpias?”.

Si bien se han logrado avances significativos en la concienciación sobre la higiene de las manos, mantener y reforzar este hábito es primordial ya que las manos limpias siguen siendo una defensa fundamental contra la propagación de infecciones y enfermedades entre las que se encuentran las Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETA).

Las manos pueden alojar un gran número de bacterias y virus tales que pueden trasladarse a los productos alimenticios.

Incorporar esta práctica en forma rigurosa ayuda a disminuir la contaminación cruzada y asegura la inocuidad de los alimentos que llegan a la mesa de los consumidores.

¿Cuándo lavarse las manos?

-Antes de manipular y consumir alimentos (en especial aves de corral, huevos crudos y carnes).

-Mientras se manipulan manipulan alimentos.

-Luego de haber ido al baño o cambiar pañales

-Después de limpiarse la nariz, toser o estornudar

-Después de tener contacto con residuos.

-Después de tocar animales.

-Cada vez que sea necesario.

¿Para qué?

-Para reducir el riesgo de propagar bacterias que causan enfermedades alimentarias (ETA)

-Para reducir el riesgo de propagar enfermedades infecciosas como por ejemplo la salmonellosis o la Hepatitis A.

-Para elaborar alimentos seguros que no produzcan enfermedades.

¿Cómo?

1-Humedecer las manos, preferentemente con agua tibia.

2-Aplicar jabón

3-Frotar palma con palma, dedos y dorso de las manos.

4-Enjuagar con abundante agua

5- En lo posible, secar con toalla desechable y cerrar la canilla con esta.