En Concordia realizan ensayos con bordura de flores nativas mejoradas para evaluar su funcionamiento en el control biológico de cultivos de lechuga. Esta evaluación representa una oportunidad de utilizar tecnologías de bajo impacto ambiental.
El objetivo evaluar las plagas y enemigos naturales que amenazan el cultivo en presencia de franjas florales. El equipo de especialistas espera aportar una manera sustentable al control biológico de plagas de la lechuga.
“Esta estrategia nos permite incrementar el control biológico de las plagas en el cultivo hortícola y por lo tanto disminuir el ingreso de insumos externos como los plaguicidas” explicó Beatriz Díaz, de INTA. Además, agregó que es el pilar fundamental de las buenas prácticas agrícolas que se encuentran de aplicación vigente y obligatoria en todo el territorio nacional.
Esta tecnología de bajo impacto ambiental se compone por dos variedades de franjas florales nativas seleccionadas, las cuales aportan recursos de néctar y polen a sus visitantes, muchos de los cuales son beneficiosos para el control de las plagas del cultivo de lechuga.
Para este proyecto se establecieron dos invernaderos, uno en presencia de franjas florales y otro sin estas. Las flores incorporadas al cultivo corresponden a dos variedades ornamentales de germoplasma nativo producidas por el Instituto de Floricultura, son mercardonia Guaraní amarilla y glandularia Alba. Por otro lado, el Aliso una planta exótica insectaria a nivel mundial de origen mediterráneo.
De esta manera, con el aporte de variedades nativas adaptadas a las condiciones ambientales y a los insectos presentes en el sistema, se espera aportar de una manera sustentable al manejo de plagas en los cultivos de lechuga.