La compañía Syngenta obtuvo el registro de dos insecticidas -uno de uso foliar y el otro para tratamiento de semillas- para el control poblacional de Chicharrita del maíz (Dalbulus maidis), vectora del patógeno Spiroplasma que causa el achaparramiento del maíz.
“La Chicharrita del maíz es una plaga conocida en el norte del país, que esta campaña se presentó con gran intensidad en esa región, y también se ha expandido en la zona centro. Su manejo resulta clave para garantizar una producción eficiente y sustentable, y evitar severos daños económicos”, comentó Nicolás Gennaro, director de Marketing de Protección de Cultivos de Syngenta para Latinoamérica Sur.
“Estas nuevas herramientas de control se suman a las ya existentes dentro del concepto de manejo integrado de plagas, como la elección del híbrido, evitar el escalonamiento de siembras y control de las plantas de maíz durante el barbecho”, agregó.
El insecticida Verdavis, con tecnología Plinazolin es un nuevo producto de aplicación foliar. Para el control de Chicharrita, debe aplicarse en estadíos vegetativos muy tempranos (V2), cuando se observan los primeros adultos en los cogollos de las plántulas. Posee características muy favorables en cuanto a eficacia y control prolongado de un amplio espectro de plagas, además de otorgar acción protectora residual.
La tecnología que se presentó a nivel global en Argentina en 2021, pertenece a una familia de insecticidas con solución eficaz en las estrategias de manejo de la resistencia.
Por su parte, Fortenza es un insecticida de amplio espectro que contiene el ingrediente activo Cyantraniliprole, y que se aplica como tratamiento de semillas previo a la siembra. Es capaz de prevenir el daño de los insectos desde el desarrollo temprano de los cultivos, mejorando su establecimiento y dando como resultado un mayor rendimiento.
“Una vez aplicado como tratamiento de semillas, el compuesto es rápidamente captado por las raíces y es transportado hacia la parte superior de la planta. De esta forma, protege los cultivos como resultado de una inhibición rápida de la alimentación y un efecto residual duradero”, explicó Luis López, gerente de Portfolio de Protección de Cultivos de Syngenta.
Syngenta viene trabajando con ambas soluciones en Brasil y Paraguay, donde ya están registradas, y cuenta con gran cantidad de información técnica acerca de su funcionamiento.