Se concretó la jornada a campo de Berardo Agropecuaria, denominada Punto NK. Campo en Acción se hizo presente allí, en la Estancia Santa Maria de localidad de General Almada del departamento Gualeguaychú, para conocer de cerca una red de ensayos de híbridos de NK Semillas que contó con la participación de Bunge Argentina en cuanto al manejo nutricional y de UPL Argentina en lo que se refiere al tratamiento de semillas.
El responsable de la sucursal Urdinarrain de Berardo Agropecuaria, Luis Ledri, afirmó: “Estamos muy contento por la convocatoria, ya que esto representa un desafío desde el momento en que preparamos los ensayos y hablamos con el productor dueño del campo”. “El año por suerte cambió para bien: hoy los maíces están performando y rindiendo muy bien. Tenemos clientes de la zona que nos acompañan jornada tras jornada, lo cual valoramos mucho ya que siempre se llevan algo de estos encuentros y siempre hay un intercambio muy lindo”.
Por su parte, César Berardo, responsable Técnico Comercial de NK Semillas, resaltó el trabajo mancomunado que vienen realizando con NK desde Berardo Agropecuaria hace ya tres campañas: “Nos dejó muy contentos el poder llegar a una zona donde no teníamos cobertura, donde la fuerza de ventas está muy bien consolidada; por eso desde NK queremos aportarle las últimas tecnologías para todos los cultivos, principalmente en maíz que es una de las fortalezas de la zona. Nos ilusiona el estar alineados con una empresa enfocada en el cliente”.
Asimismo, Karina Nardelli del área de Desarrollo y Marketing de Bunge Fertilizantes, expresó: “Desde la firma hacemos mucho hincapié en la fertilización balanceada, en el aporte de nutrientes no solo primordiales para el maíz como podrían ser el nitrógeno y el fósforo, sino también en otros nutrientes como el azufre y el zinc. Las respuestas a estos procesos se ven reflejadas en el cultivo, por lo que tenemos que pensar en fertilizar nuestros suelos y en la interacción entre los distintos nutrientes: sabemos que cuando un nutriente es deficitario en el suelo incide en la eficiencia del resto”.
Leonardo Alessandri, compañero de Nardelli en dicho área, sostuvo a su vez que “además del manejo de la fertilización, también ponemos el foco en el manejo integrado de lo que es la intensificación de la rotación. Lógicamente la fertilización es uno de los puntos a tener en cuenta para lograr un objetivo, pero asimismo una rotación adecuada, con un concepto claro de fecha de siembra, los ciclos, etc; se puede lograr tener cobertura del campo en todo el año.
“Mediante ello, a la larga lo que estamos haciendo es aportar materia orgánica en el suelo, acompañado de lo que decía Karina de que vemos deficiencias de algunos nutrientes en Entre Ríos, también podemos ver problemas en la distribución de la materia orgánica lo cual condiciona la fertilidad de los suelos”, añadió.
Martín Korec, del área de desarrollo biológico en Cultivos Extensivos de UPL, indicó: “Estamos presenciado una biosolución aplicada en maíz en este caso, para tratamiento de semillas. Lo que hace este producto es funcionar como propulsor hormonal para que la semilla crezca más rápido, lo cual mejora la uniformidad y homogeneidad del lote y resulta en una mejora de rendimiento al final del cultivo”.
“Este producto, que ya viene usándose en soja, girasol y trigo, y que ahora lo estamos aplicando en maíz, se aplica al comienzo del tratamiento de semilla. También se puede utilizar este producto de manera foliar en otros estadíos del cultivo de maíz, entre B4 y B6. Lo que hace es diferenciar mayores flores, lo que te da un potencial de crecimiento al final del cultivo”, finalizó.