Las autoridades del Instituto Nacional de Semillas (Inase) convocaron a los integrantes de la Comisión Nacional de Semillas (Conase) para una reunión que iba a realizarse este jueves, pero que finalmente no sucedió porque nadie concurrió a la misma.
En la agenda de temas de la reunión se incluyó un proyecto del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca para reemplazar a la resolución 207/16 –por medio de la cual se implementó el sistema Bolsatech– por una normativa diseñada para realizar análisis genéticos direccionados por inconsistencias detectadas en la megabase de datos del Sistema de Información Simplificado Agrícola (SISA), los cuales no sólo se focalizarían en soja –único objeto de análisis del Bolsatech– sino también en el resto de los productos comprendidos en el SISA (trigo, cebada, algodón, arveja, arroz y maní).
Pero los representantes de los fitomejoradores, productores y comercializadores de semillas no asistieron a la convocatoria al considerar que no tenía sentido plantear un cambio tan profundo cuando faltan pocos días para que asuma un nuevo gobierno nacional, y así lo cuenta la nota de VALOR SOJA.
Las autoridades del Inase aún no extendieron la aplicación del sistema Bolsatech para la campaña 2019/20 con el propósito de evitar que los forwards de soja con entrega posterior al 1 de marzo de 2020 lleven la “cláusula Monsanto”.
El remanente de la cosecha 2018/19 de soja, tanto en el disponible como en los futuros con entrega hasta el 29 de febrero de 2020, se está comercializando en el marco del sistema Bolsatech, por medio del cual los laboratorios de las Bolsas de Cereales y de Comercio –con el aval oficial del Instituto Nacional de Semillas– analizan la mercadería para detectar el evento RR2 PRO de Monsanto-Bayer (“Intacta”).
La cláusula Bolsatech indica que “en caso de detectarse la presencia de tecnologías patentadas, se proporcionará dicha información al propietario de dicha tecnología”. Es decir: no habilita a realizar descuentos compulsivos por cobro de regalías en las liquidaciones realizadas a los productores, a menos que éstos voluntariamente así lo hayan dispuesto por medio de la firma de la “licencia de uso” del evento de Monsanto (compañía absorbida este año por Bayer Crop Science).
La resolución 207/16 del Inase, prorrogada en dos oportunidades por las resoluciones 799/17 y 109/18, especifica que al comienzo de las últimas tres campañas comerciales de soja el comprador (acopio, exportador o industria) debía extraer “al productor o remitente dos muestras de grano en el primer punto de entrega, para la verificación del cumplimiento de la Ley de Semillas y Creaciones Fitogenéticas N° 20.247”.
La resolución 207/16 del Inase fue instrumentada por el entonces ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, para contrarrestar el sistema privado de control y recaudación implementado por la filial de Monsanto en las terminales portuarias argentinas. Dicha resolución permitió recuperar el monopolio de la fiscalización de semillas, el cual, complementado con el sistema Bolsatech, permitió, hasta la actualidad, que la gestión de los datos de análisis genéticos de la cosecha de soja permanezca en manos del Estado.
A partir de éxito de la fiscalización realizada en el último año en base al cruzamiento de datos de ventas de bolsas de semillas con cultivares y área declarada por los productores ante el SISA, funcionarios del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca consideran que el análisis genético del 100% de la producción argentina de soja es, además de un engorro burocrático, un despilfarro de recursos. Sin embargo, se quedaron sin tiempo para intentar modificar la normativa vigente.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó el pasado miércoles que durante el 2018 y lo que va del 2019 se analizaron, a través del sistema BolsaTech, 102,3 millones de toneladas de soja correspondientes a entregas efectuadas en 1966 establecimientos (puertos, plantas de acopio, acondicionadoras e industrias aceiteras). “De dicho total, sólo en 82 camiones se solicitó una reconsideración de los resultados, cifra que representa el 0,002% del total analizado”, indicó la Bolsa de Cereales por medio de un comunicado.