Gracias al desarrollo de equipos montables, pueden realizar tareas de siembra, fertilización y pulverización, cubriendo nichos a los que no llegan las máquinas convencionales.
Desde hace décadas, las pick ups se han convertido en las grandes compañeras del hombre de campo, siendo el vehículo por excelencia a la hora de trasladarse de un lugar a otro.
A esa función, en los últimos años le sumaron la posibilidad de participar en tareas propias de las máquinas agrícolas, como siembra, fertilización y pulverización, por ejemplo.
Ello es posible gracias al desarrollo de equipos montables sobre las cajas de las camionetas, diseñados especialmente para prestar esas funciones.
El uso de kits montables sobre pick ups es una práctica cada vez más frecuente, especialmente para atender las demandas de establecimientos de menor escala y situaciones particulares.
Es un espacio abierto en Argentina y en otros mercados del mundo para cubrir nichos a los que no llegan los equipos tradicionales.
La oferta disponible de equipos montables sobre camionetas es muy amplia, tanto en el tipo de prestaciones como en la tecnología disponible.
Incluye sistemas neumáticos de siembra y fertilización, tolvas espacidoras de disco y pulverizadoras portátiles, entre otras opciones.
Las pick ups convertidas en «agromáquinas” pueden ser utilizadas en tareas de fertilización convencional o microgranulada, siembras de pasturas y verdeos en cobertura total, pulverización de lotes pequeños o manchoneos, esparcido de productos antiempaste en praderas destinadas a ganadería, etc.
También resultan de gran utilidad para el mantenimiento de alambrados, parquizaciones, campos deportivos y barrios cerrados, entre otras aplicaciones. Una de las ventajas de las camionetas consiste en que causan menos compactación que las máquinas agrícolas tradicionales y pueden trabajar a mayor velocidad. Fuente: Maquinac.com