El titular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero, Juan Pazo recibió las buenas nuevas que tenían para darle desde el Consejo Agroindustrial Argentino, entidad que aplaudió la baja de retenciones. El tema central fueron el impuesto y los nuevos porcentajes, tras la rebaja aplicada por el Gobierno nacional.
Luego del encuentro, al cual desde el sector privado calificaron como “positivo”, el Consejo elogió la medida del Gobierno pero a la vez pidió -y comunicó que trasladó el pedido en la reunión- “la continuidad de la baja de Derechos de Exportación, así como la profundización”.
Por medio de un parte de prensa se indicó que la baja fiscal “generará un impacto significativo en las exportaciones, incentivando una mayor comercialización de los stocks, especialmente durante el primer semestre del año. Esto permitiría alcanzar exportaciones por 98,1 millones de toneladas, implicando un crecimiento interanual del 11%”, aseguraron.
En términos de valor, sostuvieron que las exportaciones agroindustriales “podrían alcanzar los u$s 47.954 millones, con un incremento de u$s 1.738 millones respecto a la estimación previa a la medida”.
“Este aumento responde principalmente a la comercialización de stocks acumulados, con ventas adicionales concentradas en el primer y segundo trimestre del año”, expusieron.
“La reunión fue muy positiva, en un marco de entendimiento del esfuerzo del Gobierno en lograr superávit fiscal y normalizar la macroeconomía, el desafío es seguir trabajando en baja de derechos de exportación que cubran todo el universo de la agroindustria con mecanismos de aplicación simples, que no generen dificultades para las empresas exportadoras”, indicó José Martins, presidente del Consejo Agroindustrial Argentino.
Para el cuerpo empresario, una continuidad de la baja en las retenciones generaría “una señal clave de confianza al sector, mejores condiciones para la planificación productiva y la adopción de tecnologías”.
“Esto permitiría un incremento de entre 4 y 7 millones de toneladas adicionales, impulsando tanto la producción como el procesamiento interno. Como resultado, las exportaciones podrían crecer entre u$s 1.500 y 2.400 millones, con la creación de aproximadamente 60 mil puestos de trabajo. Esta transformación fortalecería el perfil exportador del país y dinamizaría la actividad económica, consolidando el rol estratégico del agro en la economía nacional”, aseguraron.
No obstante, plantearon críticas a los “requisitos de elegibilidad” de los beneficios de baja de derechos: “son de difícil cumplimiento para empresas nacionales con bajo acceso al financiamiento internacional”.