“Algo que tiene que permanecer en una disputa judicial de una familia se transforma en algo casi ideológico” dijo el gobernador Gustavo Bordet hace minutos acerca del conflicto en el campo Casa Nueva de la familia Etchevehere. “Grabois no pertenece al gobierno nacional, ha tenido disidencias con el presidente, no ocupa ningún cargo. A nosotros nos preocupa la paz” también dijo el mandatario en diálogo con los periodistas Antonio Tardelli y Sebastián Martínez, por FM Litoral.
El gobernador enmarcó la situación en una controversia que no debería salir del ámbito de la Justicia y expresó que el gobierno que conduce no se saldrá de esa postura: “En el marco de una politización del conflicto familiar aparecen las críticas. Tienen un problema en la familia y buscan aliados en la política. Algunos pueden prestarse, nosotros no. Los entrerrianos saben que somos abiertos al diálogo y respetuosos. Siempre estamos al lado de los productores y no alentamos este tipo de situaciones.”
Para Bordet se trata de “un sainete que tiene años y que ahora se lo lleva a otro plano”. Incluso aportó: “Esto es ajeno al pueblo entrerriano”.
Para el mandatario “la Justicia actuó rápidamente y en dos días llamó a audiencias. La resolución, espero, será pronto y nosotros vamos a acatar lo que se resuelva”.
En relación a las denuncias de usurpación y el tono de los mensajes expresados en medios y cadenas de redes sociales fundamentando posturas de ambas posiciones, sentenció: “Me preocuparon todas las expresiones, las de adentro y afuera del campo. No es buena la violencia. Elementos extraños a la política entrerriana intervienen en este conflicto y eso es malo. Nos han metido a todos adentro de una interna familiar, de una telenovela, que debe resolver la Justicia”.