El manejo de nanofertilizantes fue el tema que dominó la agenda de la jornada de capacitación que emprendieron, en Federal, expertos de las compañías FurAgro Insumos Agropecuarios y Kioshi Stone.
El auditorio del Centro de Actividades Económicas fue el escenario donde productores y técnicos acudieron para saber más de una tecnología que llegó al agro para servir a la evolución de la sustentabilidad de la mano de la mayor productividad.
En la provincia, la provisión del insumo y el asesoramiento específico es la tarea que asumieron desde FurAgro y su titular, Ariana Furios, contó a Campo en Acción que si bien la firma data del año pasado ya logró un amplio desarrollo territorial que incluye sedes en Federal y Paraná.
“La capacitación es fundamental, no solo de productores sino también de técnicos porque es un producto nuevo que impacta en el desempeño de los cultivos. Los costos son accesibles ya que los ensayos marcan que el rendimiento justifica la inversión”, describió la experta. Añadió que “esta tecnología impacta decididamente en tiempos de sequía con aplicaciones sencillas en comparación a productos tradicionales”.
Por su parte, Facundo González, técnico Comercial de Kioshi Stone, ponderó que la firma argentina que integra lleva una década de trabajo en nanotecnología: “Sobre la base de esta tecnología se abrió una paleta ligada a la corrección de suelos, también tratamientos de semillas; nutrición y algunos balanceados”.
La información institucional da cuenta de que la compañía es la primera en llevar adelante procesos nano tecnológicos industriales para el agro. Posee una vasta experiencia en I+D+i que permite la generación continua de más herramientas para una agricultura de altos rendimientos, baja logística y de una imperceptible huella de carbono (CO2-eq), en relación con otras tecnologías de práctica.
Subrayan que sus productos actúan y proporcionan importantes mejoras de salud del suelo (biota); su interacción inmediata y efecto sinérgico con los ecosistemas logran altos rendimientos en todos los cultivos (extensivos e intensivos); incrementando la actividad biológica y favoreciendo su desarrollo.
“Es por ello, -se indica-,día a día seguimos evaluando los beneficios que proporcionan el uso de minerales en tamaño nanométrico, logrando aprovechar su gran capacidad de reacción, con muy bajo requerimiento de energía, en procesos biológicos tan importantes como son las reacciones del suelo y la fotosíntesis, participando en las escalas naturales donde se llevan a cabo estos procesos (tamaño, luz, energía, tiempos) y actuando como biocatalizadores en todas esas complejas reacciones”.