Campo en Acción dialogó con Natalia Redolfi para conocer más sobre el Programa Argentino de Carbono neutro (PACN).
“Esta iniciativa surge un poquito antes de la pandemia, en noviembre de 2019, por interés y promocionada de las principales bolsas de cereales y comercio del país: Entre Ríos, Buenos Aires, Bahía Blanca, Córdoba, Santa Fe, Rosario y Chaco. Estas entidades buscaban básicamente promover en el sector agroindustrial la generación de herramientas de cálculo y gestión de huellas de carbono, pensando en todos esos productos que salen con marca Argentina hacia el exterior, puesto que esta práctica ya empezaba a ser una práctica exigida en los mercados internacionales”, informó Redolfi.
La coordinadora nacional del PACN indicó que esta preocupación por el cuidado del ambiente se ve de alguna manera en los requerimientos internacionales, “pero también repercute en los nacionales a nivel empresas y cadenas de valor, donde empresas internacionales con objetivos fijados empiezan a requerir esta información a sus proveedores”; añadiendo a esto que lo que buscan finalmente las firmas es trabajar sobre la mitigación del cambio climático y la reducción de las emisiones.
“Esto es importante porque todos estamos viviendo los efectos de estos fenómenos, y también porque para los sectores productivos generan riesgos y necesidades de adaptación al cambio climático”, sostuvo.
Consultada acerca de la influencia de Argentina a nivel global, Redolfi explicó que las emisiones de carbono argentinas “no son muy significativas: no entramos en los diez principales países ni estamos siquiera cerca de ello. Pero lo importante es saber que cada país contribuye al cambio climático, y todos deben empezar a mejorar la eficiencia de sus sistemas productivos”.
Y precisó que, “no obstante, los sistemas productivos argentinos están empezando a mostrar una buena respuesta en cuanto a medición y estimación alineada y pensada desde el proceso productivo: ya ahí notamos diferencias respecto de los datos por defecto a nivel internacional”.