“Los profesionales que estamos en la avicultura estamos preparados para extremar las medidas para que no ingrese la Influenza Aviar (IA) a las granjas. Hay que ser muy cautelosos”, especificó Yari Lucerna. El veterinario y directivo de la Cámara Argentina de Productores e Industrias Avícolas insistió en que se impone extremar todas las medidas utilizadas para evitar el ingreso de un patógeno a los establecimientos.
“Hemos hecho simulacros”, afirmó y sentenció: “Hace pocos días lo veíamos de lejos y hoy lo tenemos afuera de nuestras granjas”.
Destacó que “el estatus sanitario de argentina no se pierde, porque si bien es denunciable porque es de alta patogenicidad y está en aves silvestres, el mismo no ha sido registrado en lotes de aves comerciales. Y estamos muy preparados para que eso no ocurra”.
Asimismo, Lucerna destacó que el primer brote data de 1978 y fue detectado en Italia. Desde ese momento se ha registrado 8.000 sucesos de IA.
En cuanto a las medidas de prevención, Lucerna señaló en primer lugar, “la responsabilidad de los colegas, y luego hacer foco en la desinfección, en los baños, los cambios de ropa al ingreso y egreso de una granja, en ser cautelosos con las cuarentenas necesarias –dependiendo el nivel de granja que se visite, evitar o prohibir las visitas innecesarias a las granjas, el aviso inmediato al Senasa ante un caso de probable infección”.