Pese a la caída de la producción esperada para esta campaña, la mejora de precios internacionales compensará la caída en toneladas, y así el valor de las exportaciones de maíz se prepara para alcanzar un récord histórico.
Las expectativas en cuanto al potencial exportador se mantienen favorables. En cuanto a la producción, la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario afirma que se alcanzarán a nivel nacional 48,5 Mt de maíz, 3 Mt de menos que el año anterior. En base a ese número, se proyectan exportaciones de 34 Mt para la campaña 2020/21, un 6% por debajo de lo embarcado en el ciclo previo, aunque aún un 18% por encima del promedio de las últimas 5 campañas (28,7 Mt).
Por otra parte, luego del desplome de los precios internacionales en los primeros meses de la campaña 2019/20 a causa de la irrupción de la pandemia de COVID-19, la evolución del commodity viró de rumbo para finalizar dicho ciclo comercial con valores un 40% por encima del que registró al inicio. Vale destacar que en enero del 2021 se alcanzaron los precios más altos del cereal desde mediados desde junio del 2013.
Este contexto de estimaciones de exportaciones para la 2020/21 levemente menores a las de la campaña pasada pero con valores iniciales considerablemente superiores a los de un año atrás genera una expectativa de ingresos muy superiores a los ciclos anteriores. En efecto, de concretarse las estimaciones y tomando como referencia los precios que actualmente se negocian en el mercado, el valor exportado de maíz en grano en la 2020/21 alcanzaría los 7.960 millones de dólares, muy por encima de los 6.000 millones que se estiman para la campaña 2019/20.
Analizando la evolución histórica del valor de las exportaciones de maíz se puede afirmar que desde comienzos del nuevo milenio su relevancia en la balanza comercial argentina ha ido en franco crecimiento, aunque con dos importantes retracciones en los ciclos 2008/09 y entre el 2013 y 2016. Finalmente, los últimos 3 ciclos el crecimiento ha sido formidable, poniendo el desafío de alcanzar los 8.000 millones de dólares este año, un 75% por encima de lo que el país exportaba, en promedio, entre el 2001 y el 2011.