A más de 300 kilómetros de la capital provincial se ubica Estancia Centella, un rincón en el este entrerriano que impulsa un trabajo contra la erosión, en la búsqueda por una producción sustentable. El establecimiento de La Biznaga SA, brazo agropecuario del Grupo Ledesma, tiene sistematizadas 20.000 hectáreas con terrazas para sus actividades agrícolas y ganaderas.
“El establecimiento forma parte de una cultura que tenemos en toda la empresa, donde no hacemos actividades de negocios que no garanticen la sustentabilidad del sistema. A partir de esa premisa, empezamos a producir y así se transforma en un negocio con algunas limitaciones, en especial en el corto plazo” comentó a Campo en Acción Andrés Blaquier, gerente general de La Biznaga.
Comunicadores y periodistas agropecuarios, pertenecientes a la Asociación Entrerriana de Periodistas Agropecuarios (AEPA), se acercaron el pasado miércoles 23 de abril al Distrito Potrero, en el departamento Uruguay, donde recorrieron el establecimiento que al igual que muchos campos de la región, hasta la década de 1990 estaba volcada a la ganadería. Hoy “posee una fuerte impronta agrícola, aunque también se cría hacienda en zona de monte, en su gran mayoría declarados como área natural protegida por un convenio suscrito con la Provincia de Entre Ríos, según explicó Roberto Becker, encargado general del campo.
De un total de 26.708 hectáreas, “20.000 son las hectáreas que están sistematizadas con terrazas para evitar la erosión, con canales colectores que permiten la evacuación del agua excedente fuera del lote en forma no erosiva. De este total, 17.300 hectáreas son ocupadas para la producción de granos y el restante a pastura para la ganadería. La rotación agrícola (base trigo, soja/trigo, maíz) es en seis años, con la idea de incorporar la mayor cantidad de gramíneas logrando mantener un buen balance de carbono y cuidando la materia orgánica de los suelos” comentó Becker.
Con 20.000 hectáreas ya sistematizadas, “Centella es conocida por la totalidad de superficie de cultivos, incluso de praderas, que se encuentran con terrazas. Antes en estas hectáreas se perdían entre 30 y 60 toneladas de suelo/hectárea/año, mientras que hoy se pierde solo 3 toneladas, tasa de regeneración natural del suelo” destacó Blaquier. En este sentido, comentó que se encuentran dando batalla para tener la sustentabilidad química, es decir “estar absolutamente seguros de que lo producido por la tierra se lo vamos a restituir”; y sobre todo el total cuidado en las normas de aplicación de agroquímicos y el uso de los banda verde, que son totalmente inocuos.
En este sentido, “queremos mantener el equilibrio químico y físico del área agrícola, y así garantizar la unidad producida de menor toxicidad del mercado. La toxicidad hoy de la agricultura, según un estudio de AACREA de 2011, en los últimos 20 años se ha descendido 111 veces, es decir hace 20 años comíamos un producto que tenia 111 veces mayor toxicidad que en la actualidad”.
Terrazas
Hacia finales de la década de 1990, según comentó Roberto Becker, se empezó a realizar agricultura permanente al observar que la erosión causaba fuertes estragos, en algunos casos ocasionaban perdida total de productividad del suelo.
“La erosión no es privativa de Centella, es un problema que tiene casi toda la provincia de Entre Ríos. En 1999 empezamos a analizar distintas estrategias para controlarla y en 2004 encontramos, lo que a nuestro criterio fue lo más importante, este sistema de terrazas que la única forma que controlamos el problema de erosión haciendo agricultura permanente. Aunque hay otras variables” sostuvo Becker.
Con 2000 hectáreas ya sistematizadas, Blaquier señaló que con las terrazas “se baja a tres toneladas en promedio. Además están calculando que hay 70 toneladas de carbono en los primeros 20 cm del suelo y que tienen una pérdida del 5% por mineralización. Esto significa que pierden 3,5 toneladas. No obstante ello, como quieren equilibrar el carbono, tienen que incorporar esas 3,5 t de carbono aportando 7 t de residuos por año. Hoy estamos prácticamente en equilibrio”.
De la redacción de Campo en Acción