Argentina bajó otro escalón en el ránking global de PBI

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Según el FMI, la economía argentina cederá 1,3% este año. Con un PBI proyectado en USD 477.743 millones, se ubicará en el puesto 27° del mundo.

En su informe sobre Perspectivas de la Economía Mundial de julio, el Fondo Monetario Internacional (FMI) precisó que el crecimiento mundial sigue siendo moderado, condicionado por el recíproco incremento de los aranceles entre los Estados Unidos y China, una cierta incertidumbre relacionada con el Brexit y crecientes tensiones geopolíticas que alteraron los precios de la energía.

En este contexto, el FMI pronosticó un crecimiento global de 3,2% para 2019, con un repunte a 3,5% en 2020. "Los datos sobre el PBI en lo que va del año, sumados a una moderación general de la inflación, apuntan a una actividad mundial más débil de lo previsto. La inversión y la demanda de bienes de consumo duraderos han sido moderadas en las economías avanzadas y de mercados emergentes, dado que las empresas y los hogares continúan postergando el gasto a largo plazo".

Para la Argentina todos los indicadores fueron más negativos que los del resto. El organismo prevé que el Producto Bruto Interno va a ceder un 1,3% en 2019, con un desplome en el consumo interno y la inversión privada, con caídas del 4,8 y el 17,5 por ciento, respectivamente, en relación a 2018. La inflación anual llegará según este pronóstico un 40% en diciembre.

Medido en dólares, el PBI alcanzará los USD 477.743 millones este año, según la proyección del organismo. Argentina será así la 27° economía mundial, un puesto menos que en 2018 y seis lugares más atrás que en 2017.

El Fondo puntualizó que "la economía de Argentina se contrajo en el primer trimestre del año, aunque a un ritmo más lento que en 2018. La proyección de crecimiento para 2019 se ha revisado ligeramente a la baja con respecto al informe WEO (World Economic Outlook o Perspectivas de la Economía Mundial) de abril, y ahora para 2020 se prevé una recuperación más moderada".

A las dificultades que el año próximo seguirá afrontando la economía doméstica –alta inflación, vencimientos de deuda, presión cambiaria-, el organismo agrega que "abundan los factores que podrían desencadenar otros episodios similares de aversión al riesgo", entre ellos, "un agravamiento de la tensión en grandes mercados emergentes que actualmente están inmersos en difíciles procesos de ajuste macroeconómico" como Argentina y Turquía.

En las últimas dos décadas Argentina resignó once puestos en el escalafón global de Producto Bruto. Cayó del 16° lugar en 1998 –pico del ciclo económico de la convertibilidad- al 27° en 2019. En el medio, después de la crisis 2001-2002, llegó a retroceder al puesto 38°, para recuperarse hasta el 21° lugar en 2015 y 2017.

Es difícil hacer una comparación homogénea, pues a fines de la década del '90 Argentina llegó a "jugar en la misma liga" que Australia y Corea del Sur, impulsada en parte por la apreciación cambiaria generada por el "uno a uno" y un alto endeudamiento en moneda extranjera. En 1998 el PBI de Australia alcanzaba los USD 380.600 millones; el de Corea del Sur, USD 374.242 millones, y el argentino, 324.242 millones de dólares.

Para 2015, el año de PBI más alto del período de tres presidencias de Néstor y Cristina Kirchner, la economía argentina generaba el doble que en 1998, unos USD 642.464 millones según la estimación del FMI. La expansión fue ampliamente positiva, aunque esta cifra parece exagerada por el atraso cambiario que se advertía después de cuatro años de vigencia del "cepo".

Sin embargo, Australia y Corea del Sur, que en 1998 competían casi a la par con Argentina, progresaron mucho más en cuanto a productividad y duplicaron el PBI argentino, con USD 1.235.061 millones (1,2 billón) y USD 1.382.764 millones (1,4 billón), respectivamente.

Para 2019, Corea del Sur (USD 1.656.674 millones) y Australia (USD 1.417.003 millones) estarán triplicando el PBI de Argentina (USD 477.743 millones), después de encadenarse dos años recesivos en el plano local y sumar tres años negativos en los cuatro de gestión de Mauricio Macri.

Tenue mejora para 2020

EL FMI pronosticó que la actividad económica argentina registrará un modesto crecimiento de 1,1% en 2020. En términos nominales -donde inciden factores como el nivel del tipo de cambio- el organismo dijo que el PBI podría alcanzar los USD 515.353 millones –similar al de 2011-, para redondear así un ciclo de casi una década de estancamiento. No obstante, la mejora permitiría desplazar a Irán del 26° puesto entre las mayores economías del mundo.

El Fondo estima para Argentina que en 2020 crecerán 2,5% las exportaciones y aumentarán 1% las importaciones, luego del derrumbe de 14% proyectado para 2019. En tanto, espera que el consumo se recupere 0,8%, luego de una baja del 4,4% esperada para este año, mientras que se calcula una inflación del 40,2% para 2019 y una baja al 32,1% en 2020. Por otra parte, estima que la inversión crecerá un 0,4%, luego de caer un 17,5% este año. En cuanto al desempleo, el informe proyecta una tasa del 10% hasta 2021, cuando podría caer al 9,8 por ciento.

Otras proyecciones son más optimistas que las del FMI, aunque están lejos de contagiar entusiasmo. El equipo de Research del banco BBVA calcula que PBI argentino crecerá 2,5% en 2020, tras anotar un -1,2% en 2019. En tanto, un informe de la Alianza Latinoamericana de Consultoras Económicas (LAECO, por sus iniciales en inglés) refirió que el PBI de Argentina restará 1,6% en 2019, con una recuperación de 2% en 2020.

Promediando 2019, Argentina ya estaría saliendo del proceso recesivo. La última semana el INDEC informó que en mayo el Estimador Mensual de Actividad Económica exhibió un alza de 2,6% interanual, impulsado por al agro, que se recuperó con una campaña récord de la histórica sequía de 2018.

"Si bien los números negativos podrían ir quedando paulatinamente atrás, la mejora sería lenta y acotada. Como resultado, proyectamos que el PBI cerrará el año con una caída de 1,4% interanual, atenuando sensiblemente la contracción del 3% acumulada en los primeros meses del año pero quedando también muy lejos de arrojar un saldo positivo", señaló un reporte de Ecolatina.

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