El grupo empresario está cumpliendo 60 años de actividad y con grandes expectativas para este 2018. Héctor Motta realizó un balance de lo fue 2017 y los proyectos que se avizoran en materia avícola.

“Pasamos un 2017 complicado, con una rentabilidad esquiva y un mercado internacional que no se terminaba de recomponer en los productos agroalimentarios. Además teníamos un dólar retrasado que no nos permitía ser competitivos, sumado a la gran carga impositiva que tiene el sistema argentino”- expresó el empresario señalando que estos son los principales puntos sobre los que hay que trabajar para la recuperación de la competitividad.

Dado este panorama, Motta reconoció que hubo un achique de producción ya que pasaron 17 meses sin poder corregir el vector de rentabilidad, debido a que el mercado internacional no respondía, y el mercado interno estaba “sobre ofertado”.

Sin embargo este achique de producción generó un cambio en el perfil de producción que dio lugar a varios factores interesantes.

“Después de esa reducción estamos con el ojo puesto en la recuperación de esta gran maquinaria que estaba parada, este cambio viene a raíz de que el mercado internacional cambió y nos va a facilitar el acceso. El gobierno también tomó una decisión inteligente, que es acompañar con un dólar que realmente forme parte del sistema de competitividad que nos está haciendo falta y hay una promesa gradual de ir reduciendo impuesto. Si tomamos estos factores tenemos una expectativa positiva de cara a este 2018”- destacó Motta.

Consultado sobre los proyectos de inversión que están en vigencia para la provincia, comentó que en General Racedo, Departamento Diamante, están pensando en el desarrollo de una nueva planta frigorífica, que va a tener dos etapas con 5000 metros cubiertos en una primera etapa y 8000 metros cubiertos en una segunda etapa.

“Esto necesita de un acople de la base productiva que es un reordenamiento de la base productiva de genética. Aprovechando que nos hemos radicado en Federal estamos pensando en desarrollar un segundo complejo de bioseguridad para alojar reproductoras pesadas, buscando un resguardo sanitario y desarrollar la excelencia productiva que indudablemente se está dando en esa zona. Conseguimos gente muy capacitada también y eso nos estimula para hacer estas dos inversiones que estarán alrededor de los 30 millones de dólares”.

El compromiso social

Con un compromiso social el empresario destacó con gran orgullo la instalación del Instituto Tecnológico Universitario localizado en Crespo, que actualmente tiene entre el 98 al 100% de ocupación.

“En Racedo vengo siguiendo un sueño que es crear un centro de desarrollo de sistema de informática. Satisfactoriamente podemos adelantar que lanzamos lo que es el plan 111MIL de formación de programadores en sistema java, que se dictara a partir del 7 de abril con título de nivel nacional y con gran salida laboral”- agregó.

Finalmente dando una mirada sobre la provincia, el empresario tomó como metáfora a la música:

“En Entre Ríos nos falta ritmo, con esto quiero decir que no estamos a ritmo entre lo privado y lo público. Desde el año 87 venimos reclamando que los caminos de la producción sean una realidad. Las rutas van muy lentas, y los caminos están muy demorados, eso es una deuda pendiente. El sistema ferroviario está olvidado, valoro la apuesta del gobernador en el sistema portuario, vemos inversiones en Diamante e Ibicuy y comienza a moverse la costa del rio Uruguay. En fin, no vamos a ritmo, debemos encontrar de parte del sistema burocrático de la provincia mayor velocidad para que todos podamos marchar al mismo compás”.

Redacción – Campo en Acción