Las lluvias de la semana pasada no hicieron mella sobre el estado de sequía en el norte provincial, es decir, un balance hídrico deficitario que valida el comentario hecho acerca de las insignificantes marcas observadas del centro para el norte de la provincia. Hacia el sur se aprecia una mejora temporaria, que no logrará afianzarse considerando las perspectivas de tiempo seco que se esperan para este cierre del mes de abril.

Así informó el Sistema de Información de Bolsa de Cereales de Entre Ríos (SIBER), quien observó que en la zona donde las lluvias alcanzaron los 50 milímetros en la jornada del viernes pasado, el transcurso de cuatro jornadas con alta insolación, ya han forzado al balance hídrico hacia un nivel escaso de reservas.

Como venia sosteniendo el SIBER en informes anteriores, posiblemente en lotes recién cosechados, la situación hídrica puede presentar una posición más sobrada, pero claramente la pérdida de continuidad de los sistemas precipitantes, condiciona seriamente la posibilidad de una recuperación plena de las reservas. En el mejor de los casos aparecen sectores con reservas regulares.

Desde el punto de vista de la cosecha, el tiempo sigue siendo beneficioso. Las tareas de trilla y acopio se están llevando a cabo en condiciones ideales y sólo para aquellos productores que tengan pensado sembrar trigo o algún otro cultivo de invierno, el panorama presenta más incertezas a la hora de tomar decisiones. Es decir el tiempo seco permite cerrar la campaña gruesa con muy buen ritmo, pero hay que ser muy cautos para definir las estrategias de siembra. El agua acopiada debe ser conservada de la mejor manera y aquí básicamente la experiencia de manejo con buenos barbechos, es la que suele hacer la diferencia. El mediano plazo, es decir, la última parte de abril y la primera semana de mayo, no parece traer novedades en cuanto a un cambio de este patrón.